dimecres, 19 de desembre del 2012

Lotería y dinero negro. Eliseu Santandreu. Diari Sabadell 14-12.




Para blanquear dinero negro se conocen varias prácticas. Una de ellas consiste en comprar a su legítimo titular, el décimo de lotería u otro premio resultante de un sorteo. A cambio de adquirir dicho billete, el defraudador, cuyo objetivo con esa operación es aflorar dinero negro ofrece un sobreprecio al importe del premio, a cambio de adquirir dicho boleto que, además de estar exento de tributación, le permite legalizar así su dinero, hasta entonces opaco o ilícito. Ahora que estamos muy  cerca del sorteo de Navidad, puede ser oportuno el comentario.

Las fases para perpetrar este tipo de fraude son: 1º) La persona interesada en lavar su dinero negro rastrea las entidades bancarias de la zona donde han caído los premios más importantes de un sorteo; 2º) Localizadas las entidades donde están depositadas los títulos agraciados, el defraudador elige a un empleado de la entidad al cual le propone que actúe de intermediario en el intercambio a proponer al poseedor del boleto premiado, ofreciéndole una comisión que puede rondar el 10%.

Por ejemplo, a una persona que le haya correspondido 400.000 euros en la Lotería de Navidad el estafador le puede ofrecer 450.000 euros por el billete y a la persona de la entidad bancaria que ha hecho la gestión otros 40.000 euros en concepto de comisión. ¿Qué beneficio obtiene el defraudador? Si bien paga 90.000 euros (50.000 más 40.000 euros) además, del importe del premio, se ahorrará lo que le podría suponer declarar ese dinero más las multas y sanciones a las que hubiera incurrido, lo cual pone de manifiesto que se trata de un negocio redondo, quedando, ante Hacienda, como el legal propietario de 400.000 euros, alegando que el décimo lo adquirido en una Administración de Lotería y, además, esa afloración ha venido estando exenta de  tributación.
 En cuanto al propietario legal del billete que acepta la oferta y “vende” el décimo al precio ofertado, se encuentra con 470.000 euros en efectivo que no puede justificar y que, paradójicamente, el verdadero defraudador le ha traspasado el “delito” pasando a ser ahora, el defraudador, ante Hacienda.

Este método ha sido muy utilizado por muchos defraudadores y algunos políticos, como el caso Carlos Fabra, presidente del PP de Castellón, impulsor  del célebre aeropuerto sin aviones, que declaró que su incremento patrimonial procedía de que le había tocado el gordo, “varias veces”. Otro caso, el de la familia de Juan Antonio Roca, cabeza de la trama de corrupción inmobiliaria conocida como Operación Malaya, que tuvo la “inmensa suerte” de que durante una década le tocara, según sus propias declaraciones, nueve veces consecutivas el gordo, hasta que Hacienda destapó la falsedad porque todo era una trampa.

Técnicos de Hacienda han venido advirtiendo con insistencia que esa operación supone un gravísimo perjuicio a los agraciados. Justificar el dinero negro que ha percibido por la venta ante Hacienda ahora le corresponde a él. Salvo que se gaste todo el dinero en viajes, saraos u otros medios de dilapidación, adquirir bienes (casas, coches, etc.) con ese dinero “ilegal” deja rastro.

NORMAS RELATIVAS A LA LUCHA DEL FRAUDE FISCAL.

La reciente normativa contra el fraude fiscal prohíbe realizar pagos en efectivo superiores a los 2.500 euros en operaciones en las que intervienen empresas y autónomos, facilita a Hacienda el conocimiento inmediato de esas operaciones, con lo que supone de sanciones e incluso ser declarado colaborador de un delito de blanqueo de dinero.
Por otro lado, el sorteo de la Lotería de Navidad del próximo 22 de diciembre será el último sorteo de Navidad en que los premios se percibirán libres de impuestos ya que a partir de primero de año,  a los premios superiores a 2.500 euros que reparten Loterías, Apuestas del Estado, Cruz Roja, Comunidades Autónomas y la ONCE, se les aplicará un gravamen del 20% que tendrán el carácter de  retención a cuenta. Es decir, cuando el afortunado cobre su premio ya se le descontará el impuesto, contrariamente a lo que ha venido sucediendo en que hasta ahora estaban exentos de tributar en el IRPF. A partir del Sortero del Niño, en Reyes, ya se aplicará esa normativa.